"Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro". - Romanos 6:23
"La verdad Duele" o "La Verdad Oculta", una entretenida película del genial Will Smith, narra la historia verídica del Dr. Bennet Omalu, quien descubrió la Encefalopatía Traumática Crónica ("Chronic traumatic encephalopaty", CTE), un mal que ha aquejado a varios jugadores de la NFL por los golpes recibidos en la cabeza a lo largo de sus carreras.
El Dr. Omalu descubrió los mortales peligro de jugar Fútbol Americano, llegando a la conclusión de que Dios no diseño al hombre para jugar Fútbol, demostrando su teoría con estudios y seguimiento al historial clínico de jugadores profesionales.
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Así como está comprobado que Dios no nos diseñó para jugar fútbol americano, ya que su descuidada práctica puede ser letal, está 100% comprobado que Dios tampoco nos diseñó para practicar el pecado, este es más destructivo en nuestro cuerpo que los golpes producidos por un deporte, así como el Dr. Omalu para salvar vidas presento un estudio a la NFL de los serios peligro del fútbol, Dios nos presentó un libro: la Biblia, donde nos muestra un historial de personas que practicaron el pecado y no les fue bien, nos informa de las consecuencias de este y del precio que tuvo que pagar para que el pecado no se haga dueño de nuestras vidas y nos destruya.
Proveyó la cura para el pecado y nos dio el ejemplo y los recursos para poder resistirlo.
La NFL estaba en contra de esos estudios porque no eran favorables para su negocio, de igual manera el enemigo y el mundo le quitan seriedad a las consecuencias de las prácticas del pecado, los medios lo fomentan y los hombres lo practican, el pecado en este mundo vende y vende mucho es un buen negocio.
Como el Dr. Omalu tenemos la responsabilidad y la comisión de llevar al mundo el mensaje de salvación, nuestro mensaje no involucra salvar al cuerpo sino algo mucho más importante: EL ALMA.
Y en el proceso de llevar ese mensaje al mundo, tenemos una palabra en Romanos 12:2 (TLA) que nos exhorta, alienta y reconforta:
No vivan ya como vive todo el mundo. Al contrario, cambien de manera de ser y de pensar. Así podrán saber qué es lo que Dios quiere, es decir, todo lo que es bueno, agradable y perfecto.
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