EL PIN

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Mientras oraba, mi hijo menor trajo a mi un PIN que había creído perdido, estaban acomodando el cuarto con su mamá y lo encontraron.

Es un PIN que me recuerda mucho que pude haber sido mas útil, que pude haber hecho mas si mi confianza en Dios no hubiera flaqueado, si no hubiera sido tan débil y carnal.

Se llenan de lagrimas mis ojos, porque ese PIN me recuerda que me aleje de un ministerio hermoso y poderoso, de personas increíbles, y de una persona que amo y se que me ama en el Señor y confiaba en mí, si tan solo pudiera retroceder el tiempo y hacer lo correcto, pero ya no es posible.

Pero también ese PIN enciende un fuego en mi corazón, y me da esperanzas, porque aun no es tarde para volver y solucionar las cosas, sera difícil, pero es posible.

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Hermano, todos nos equivocamos y la mayor parte de las veces lo hacemos en tiempos de debilidad y siempre habrá algo que nos lo recuerde y avergüence, por lo que debemos atender con mayor urgencia esas áreas que nos pueden llevar a fallar y a perder tantas cosas hermosas que el Señor tiene para nosotros.

Miro atrás y pienso que si hubiera sido mas espiritual, si hubiera orado mas, no hubiera pasado lo que paso, me hundí en mi preocupación y deje que mi desesperación tome decisiones.

Dos cosas: Si te paso algo parecido debes saber que si respiras, aun estas a tiempo de solucionarlo. Y que Dios te ama de la misma manera que te amaba antes de que te equivoques.

Por mi parte, orare para que mi reconciliación con esa persona y ministerio ocurra y te animo a hacer lo mismo, es una marea de avanzar, Dios te bendiga.

P.D.: Amo es PIN