No es hasta que ya tienes un carro o estas a cargo de una casa, que empiezas a valorar las herramientas que sirven para ciertas tareas.
Para el carro no sabes lo útil que es una llave de tuercas, o un juego de dados con los que jugabas a armar torres o a rondarlos y tu papá te gritaba, o un simple desarmador, o cuando quieres colgar un cuadro el martillo, el taladro, o cuando vas a pintar te acuerdas del balde que botaste a la basura que te podría ser muy útil.
El punto es que valoras mas algo cuando sabes lo útil que puede ser para tu vida cotidiana, para reparar algo o embellecer partes de tu casa, nadie va a valorar tanto una herramienta si no hasta cuando en un momento determinado facilite al 100 % su trabajo o lo ayude a hacerlo con mas eficiencia.
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La Biblia tienen consejos maravillosos, que muchas no les das importancia porque en ese momento no te son útiles, puede pasar por alto consejos de matrimonio cuando eres soltero por ejemplo.
Pero cuando experimentas lo útil que pueden ser, amaras esos consejos como lo hacia el salmista:
!!Oh, cuánto amo yo tu ley!Todo el día es ella mi meditación.Me has hecho más sabio que mis enemigos con tus mandamientos,Porque siempre están conmigo.Más que todos mis enseñadores he entendido,Porque tus testimonios son mi meditación.Más que los viejos he entendido,Porque he guardado tus mandamientos;De todo mal camino contuve mis pies,Para guardar tu palabra.No me aparté de tus juicios,Porque tú me enseñaste.!!Cuán dulces son a mi paladar tus palabras!Más que la miel a mi boca.De tus mandamientos he adquirido inteligencia;Por tanto, he aborrecido todo camino de mentira.
Salmos 119:97-104
La gente no sabe lo útil que puede ser la Biblia y la ven aburrida, innecesaria, pero es importante que sepan lo útil que son sus consejos, les puede salvar la vida y el alma.
Por eso cuando des consejos que no te gane tu opinión sino transmite fielmente las escrituras, que las personas sepan que lo que las ayudo no fueron tus palabras si no la palabra de Dios quien es Él que las conoce en lo mas profundo de su ser y solo Él puede obrar para hacerlos nuevos usando la buena semilla que sembraste en ellos.
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